Una función muy importante del mensaje existencial del sueño es presentar a su soñador los ‘agujeros’ de su personalidad. Se presentan como evitaciones o como objetos o personas [en el sueño] con los que identificarse resulta imposible o provoca miedo. En otras palabras, el trabajo de los sueños llama la atención sobre aquellas necesidades en el individuo que no han sido aún satisfechas porque no han sido reconocidas. Y así el patrón consistente en satisfacer la necesidad queda interrumpido, y como consecuencia tenemos sueños recurrentes, a menudo pesadillas, que seguirán llenando de porquería el terreno durmiente del soñador hasta que sean confrontados.
Testimonial
© 2024 · La silla de Perls.
Últimos comentarios