Tú eres tus sueños, tú eres todos y todo lo que ocurre y se presenta en tus sueños. Así de sencillo y así de complejo. De esta manera, cada uno de tus viajes oníricos se revela como una oportunidad para conocerte mejor, descubrir tus armonías y conflictos, reconocer los aspectos propios con los que estás más identificadx y también, especialmente, aquellos que rechazas, encubres e incluso desconoces de ti. Los sueños reflejan tu totalidad y a la vez manifiestan la forma en que estás en pelea con tu totalidad. Son una obra hecha por ti, y que versa sobre ti, desde lo más trivial a lo más profundo y existencial: qué te estás permitiendo vivir y qué de tu existencia está muerto. Eso manifiestan tus creaciones oníricas.
Si un sueño es una composición que has realizado tú y atesora este conocimiento, ¿cómo es que la mente no es capaz de hallarlo con el mero recuerdo del sueño? ¿Cómo acceder a esa información, a esa comprensión de lo que te falta de ti en tu vida? ¿A través de un libro que, de forma mecánica, dicte los mensajes que tus sueños atesoran? ¿Pueden «traducir» tus sueños lxs terapeutas, psicólogos y expertos en el trabajo onírico? Según la terapia Gestalt, no porque solo tú tienes la capacidad de descubrir el significado de tus sueños. Son obras tuyas, tú has elegido la escena, con su ambientación, protagonistas y acción, y no se trata de una elección fortuita sino que todo tiene un sentido que tú puedes revelar, tú fuiste quien le dio ese sentido al sueño. Tu mundo onírico está hecho por ti y de ti…
O dicho de otro modo, tú eres tus sueños.
De manera que solo tú puedes revelarte el significado existencial del mensaje que te mandas a ti mismx. ¡Simplemente necesitas descubrir cómo hacerlo! Si estás interesadx, continúa más abajo.
Para leer más sobre el enfoque gestáltico de los sueños, lee esta entrada.